Los principales líderes del turismo del Caribe señalan la experiencia pasada de la región con grandes interrupciones superadas como esperanza para su futuro tras el COVID-19.
Y es que el Caribe cuenta ya con una ‘considerable experiencia en el manejo de interrupciones y riesgos’, tal y como ha recordado el director general de la Asociación de Hoteles y Turismo del Caribe (CHTA), Frank Comito.
“Demostramos esta publicación el 11 de septiembre, a través del SARS, el Zika, los huracanes y otros desastres naturales en las últimas dos décadas, todo mientras experimentamos un crecimiento sin precedentes”, destacó.
Dijo que el CHTA ha estado trabajando activamente para implementar iniciativas de monitoreo, concientización y educación en toda la región, trabajo que comenzó inmediatamente después de comprender la amenaza de COVID-19.
Explicó que si bien gran parte de lo que sucede está más allá del control individual, la “duración e intensidad de la pandemia’ habría que manejarla mediante ‘acciones colectivas sólidas de empresas, organizaciones, comunidades y gobiernos”.
Manifestó que, con todo, se desea que el turismo en el Caribe emerja y sepa utilizar las lecciones aprendidas para ayudar a que la región sea aún más deseable.
“A pesar de las nubes oscuras temporales, el sol brilla en el Caribe y continuará haciéndolo. A medida que pasemos por esto, el mundo necesitará al Caribe para ayudarlo a sanar”, destacó Comito.