Con el apoyo de USAID, se realizaron seis jornadas de reforestación en la cuenca alta del río Masacre durante dos meses, donde se sembraron plantas de bambú, una de las especies que más contribuye a la recuperación del río. Estas jornadas han implicado un trabajo conjunto con las autoridades locales y miembros de la comunidad, integrando al Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, el Instituto Agrario Dominicano y el Instituto de Desarrollo del Noroeste (INDENOR).
De igual manera, el proyecto ha permitido reforzar el trabajo realizado por nuestra brigada de protección. Con estas iniciativas, buscamos asegurar la preservación y recuperación del río Masacre, garantizando su vitalidad para las generaciones presentes y futuras.
José Gonel, líder comunitario de Dajabón y Gerente Honorario de Comunicaciones de la Asociación para la Recuperación y Desarrollo del Río Masacre (AREDECUMA), ha trabajado incansablemente durante seis años para proteger el río de posibles amenazas e involucrar a la comunidad en su cuidado.
“Actualmente contamos con 23 integrantes que pertenecen a las diferentes comunidades de Loma de Cabrera y Dajabón”, dice José. “Somos profesionales ambientales, agricultores y líderes comunitarios. Nuestro objetivo como organización comunitaria es apoyar en la protección del río Masacre, ya que existe una situación crítica en la cuenca de este río por incendios forestales y tala de árboles”.
José enfatiza la importancia del río Masacre como fuente principal de vida para gran parte de la provincia de Dajabón. Ha colaborado estrechamente con USAID a través del proyecto Comunidades Viviendo en Paz, implementado por Christian Aid y el Centro Montalvo, para salvaguardar el río.
En los últimos años, el caudal del río Masacre ha disminuido debido a la deforestación, la tala masiva de los bosques circundantes y la remoción de arena de sus orillas y cauces, acciones llevadas a cabo sin criterio ni reforestación posterior.
El proyecto de reforestación también ha permitido reforzar el trabajo realizado por nuestra brigada de protección. Con estas iniciativas, buscamos asegurar la preservación y recuperación del río Masacre, garantizando su vitalidad para las generaciones presentes y futuras.
El Río Masacre, fundamental para el desarrollo de las comunidades del Noroeste de República Dominicana, abastece de agua a cuatro acueductos en Dajabón y alimenta otros afluentes de la zona. Con una longitud de 55 kilómetros (más de 34 millas), el río Masacre –también conocido como río Dajabón– se origina en Loma de Cabrera, en la Provincia de Dajabón, y desemboca en el mar por la comunidad Manzanillo-Pepillo Salcedo, en la provincia de Montecristi.
Este río es vital para el consumo humano, la producción agrícola y ganadera, y las actividades domésticas de la población fronteriza. Además, forma parte de la frontera dominicano-haitiana, con una extensión de ocho kilómetros en la zona de Juana Méndez.